sábado, 10 de junio de 2017

ROGUE ONE, UNA HISTORIA DE STAR WARS — EL REVERSO TENEBROSO DE LA ALIANZA REBELDE

Uno de los tantos afiches exhibidos
Star Wars Rogue One, pese a ser un "añadido", es muy superior al Episodio VII, supuestamente el no-va-más. (Aun así, procuraré visionarla de nuevo, a ver si le encuentro más virtudes que las que le aprecié ahora —pocas tiene de momento; ha conseguido, ¡al loro!, que aumente mi interés por FURY ROAD, que me desconcertó un tanto—, por aquello que decía el cornudo: No sabes lo que te pierdes, muchacho. —Empero creo nada me pierdo. Todo lo vi diáfano. Y era mínimo-nimio—.)

Su atractivo, aunque tenga cierto regusto a MALDITOS BASTARDOS (o un mucho), reposa en que encontramos más rostros familiares (no me refiero ni a la "rejuvenecida/resucitada" CARRIE FISHER o al también resucitado PETER CUSHING) que en la otra cinta citada, donde la presencia del trapero HAN SOLO no salva el desastre del Stormtrooper desertor, o el nieto de la careta, así como que, Rogue One, muestra el Reverso Tenebroso de la Alianza Rebelde.

Hasta ahora, a ésta la presentaban como un idealizado grupo de comandos lanzados bravos a la liza contra el malvado/extendido Imperio Galáctico con galante conducta. Aquí vemos que, en nombre de la libertad, los rebeldes no dudan en situarse al nivel de los imperiales, tanto en tácticas como proceder moral.

Hay que ganar la guerra. En el amor y la guerra, todo vale, cita el adagio. Pero si nosotros, los buenos, actuamos como los malos, ¿en qué posición nos deja eso? ¡No derivamos como ellos! ¡Somos mejores! Es el sustento de nuestra lucha contra ellos.

Otro más que resumen el contenido del filme. Se echa de
menos la maestría de DREW STRUZAN, por cierto
Pero ese negativo proceder luego pueden disimularlo afirmando que eran “indispensables sacrificios” y que un piélago de remordimientos corroe a estos rebeldes por su poco moral proceder. Sin embargo, pagar mal con mal, ¿es la ética de los buenos? Nos educan afirmando lo contrario.

Otra cosa apreciable (aparte del minuto excepcional de DARTH VADER durante el asalto a la nave) es qué gigantesco y bien pertrechado estaba el Imperio. El de Lucas, por obvias limitaciones económicas y de medios, ni permitía suponer tal colosal maquinaria.
Espero que el Episodio VIII aprenda esta lección y remiende los harapos del VII. Querer recontar/reconstruir, para los jóvenes espectadores del siglo XXI, el clásico EPISODIO IV, ha conseguido un resultado desalentador. Lo escribí cierta vez: estas continuaciones conseguirán hacer buenos los ahora denostados Episodios I a III.

Tanto vi del Episodio VII.